¿Cómo podemos garantizar que todos los seres humanos puedan vivir en un entorno natural y social intacto, y que nadie sea abandonado a su suerte? Todos estamos llamados a participar en el desarrollo de soluciones que tengan en cuenta a todos los continentes, todas las religiones y todos los estratos sociales. Este número de la revista Concilium reflexiona sobre la función que tiene la religión en este contexto. Concretamente pone el foco en un mundo cada vez más urbanizado, en el que las ciudades son los lugares concretos donde tienen que afrontarse y resolverse los desafíos más acuciantes de nuestro tiempo.