Siempre dama de honor
Nicola Marsh
Otra invitación de cantos dorados apareció en el buzón de Eve Pemberton pero, en lugar de asistir sola como siempre hacía, en aquella ocasión la práctica mujer de negocios buscaría una pareja falsa. El multimillonario Bryce Gibson era casi una cita de ensueño. Solo había un problema: era el hombre que le rompió el corazón a Eve cuando era adolescente.
La sensata secretaria
Jessica Hart
¿Sabes cuando conoces a un hombre guapísimo y sientes mariposas en el estómago? Pues eso fue lo que sentí yo, Summer Curtis, cuando conocí a mi jefe, Phin Gibson, un hombre tan atractivo como una estrella de cine. Phin es guapísimo, pero siempre llega tarde, es horriblemente desordenado y caótico… todo lo contrario a mí. ¡Y, sin embargo, está consiguiendo que yo, la prudente Summer, quiera soltarme el pelo!
De nuevo enamorada
Jennie Adams
Después de un duro desengaño amoroso, Lally Douglas no quería volver a arriesgarse; prefería pasar inadvertida, por eso durante años solo había trabajado para su familia.
Pero entonces se vio obligada a salir al mundo y encontrar trabajo, y así acabó siendo el ama de llaves de Cameron Travers. Para su sorpresa, muy pronto empezó a desear que su nuevo jefe se fijara en ella y la viera como algo más que una empleada.